La vida de Rosaria no era normal. Como profesora de Lenguaje y Literatura en la Universidad de Syracuse, Rosaria era una feminista hecha y derecha, una lesbiana empeñada en dejar expuesto un sector que ella consideraba una amenaza contra sus libertades: la derecha religiosa. Rosaria Butterfield recuerda cómo veía a los cristianos en ese tiempo, cuando era una líder respetada en la comunidad de GLBT. Pero luego recibió una sorprendente carta que le presentó al pastor Ken Smith y a su esposa, Floy. Rosaria habla sobre cómo desarrolló una amistad con esta pareja, lo que hicieron para recibirla y hacerle reconsiderar su punto de vista acerca de Dios. En 1997, la doctora Rosaria Champagne era profesora titular de la Universidad de Syracuse. Era una feminista comprometida que realmente no creía en Dios. Había otro aspecto de su historia que la convertía en una convertida improbable.