¿Cómo podemos ayudar a formar a nuestros hijos para que no caigan presos de la trampa del engaño?La razón no es porque queremos ser espías y no es porque queremos atraparlos, no estamos aquí para caerles encima, no es un asunto de “estás haciendo mal y voy a atraparte y probar que estás mal”.Quiero que sepan que los ojos del Señor siempre están sobre ellos y que la manera en la que van a saberlo es porque mamá y papá siempre están observándolos y enterándose de todo.En este programa vamos a hablar del engaño en la vida de los preadolescentes.