Hay algo en la simplicidad que a veces deseamos embellecerla. Nos vemos tentados a querer hacer algo más con ella, sentimos que algo le hace falta y eso ciertamente se aplica a la historia de la Navidad. La historia es realmente sencilla y las personas involucradas en ella se han vuelto tan familiares que tal vez hasta nos resulte aburrida a veces.