Una vez que los muros y las puertas de Jerusalén fueron finalmente terminados, Nehemías inmediatamente hizo planes para avivar la espiritualidad de los habitantes con la autoridad de las Escrituras. El testimonio de la Palabra de Dios había permanecido en silencio por mucho tiempo y el comienzo de un avivamiento espiritual estaba por suceder. El potencial para tener un aviamiento siempre estará presente en nuestras vidas si recurrimos al estudio de la Palabra de Dios.