¡Hemos comenzado! Después de haber dado un vistazo general a Gálatas, ahora nos disponemos a estudiar esta carta versículo por versículo. Pablo no se anda por las ramas empleando tanta diplomacia ni cordialidad al escribir esta carta. Tal como un cirujano va detrás de un tumor maligno que necesita ser extraído, Pablo usa el bisturí del evangelio y corta de inmediato presentando su caso de manera directa y contundente. El punto principal del apóstol es el siguiente: otro evangelio no es el Evangelio. Cualquier variante de éste, es una corrupción de la verdad.