En lugar de mantenernos a oscuras en cuanto al futuro del mundo, Dios ha escogido exponer lo que está por delante para que no estemos en la ignorancia y el temor. Partiendo del breve prólogo introductorio de Juan, aprendemos que el propósito del libro de Apocalipsis es revelar las cosas que empezarán a desarrollarse en cualquier momento. También aprendemos que una bendición especial va asociada con el estudio y la aplicación del libro de Apocalipsis. Nuestra decisión respecto a Jesucristo y a la dádiva gratuita de salvación que Él ofrece determinará si nuestro juicio está detrás de nosotros o por delante. Mientras esperamos el retorno de Cristo, la gracia y la paz nos vienen por el Padre, Hijo y Espíritu Santo.