Cuando se enfrentan situaciones que humanamente parecen imposibles, es sorprendente ver cuántas personas recurren a métodos humanos o al consejo de personas que no tienen la menor idea de los que están pasando, en vez de acudir a Dios en oración y esperar en Él. Después de todo, Dios es el especialista de las imposibilidades. ¡No hay nada que Él no pueda hacer! La Biblia claramente nos dice en Lucas 18:27, que «Lo que es imposible para los seres humanos es posible para Dios». Sin embargo, cuán a menudo nos demoramos en acudir a Él y someternos a Su voluntad—aunque sabemos que Él siempre se muestra fiel a nosotros cada vez que le buscamos de corazón, incluso en las circunstancias más difíciles y las situaciones aparentemente imposibles de la vida. Por lo tanto, para experimentar el poder de la posibilidad en una imposibilidad, debemos prevalecer a través de la oración. Dios nos reta a orar fervientemente por las cosas que están más allá de nuestras capacidades humanas.